En la sexta moción de censura de la democracia, el candidato derrotado, Ramón Tamames, criticó que los partidos políticos hubieran convertido la cita parlamentaria en una «campaña electoral». Aunque aún faltan varios meses para las elecciones oficiales, los partidos interpretaron la moción como un evento electoral. Desde el Palacio de la Moncloa, hay una sensación de éxito ya que la moción movilizó a la izquierda y les permitirá enfatizar que el gobierno de PSOE y Unidas Podemos necesita otra legislatura para consolidar los avances y revertir los recortes del expresidente Mariano Rajoy.

Aunque hubo críticas hacia Tamames, el mensaje principal no se centró en ellas. En cambio, algunas fuentes cercanas al presidente afirmaron que el éxito de la moción se debió a su capacidad para unir al PP y a Vox. Uno de los ministros más cercanos a Pedro Sánchez salió eufórico del hemiciclo y dijo: «Ojalá haya muchas más». Estas mismas fuentes también señalaron que Tamames se representaba a sí mismo.